Cuando pensaba volver a escribir mis poesías
jamás pensé empezaría cuando acababa tu vida.
Hoy sin ganas por la pena y con ansias de llorar
te dedico este poema,que llegará donde estás.
pero actúas de vigía,siempre atento
la mirada ilusionada.
El rocío de tu amor riega el fruto deseado
poco tiempo disfrutado,
que hoy es bastón y esperanza
de la mujer que te amó.
Jardinero de ilusiones,
alma buena y verdadera
allá donde quiera que estés,
aquí,los que te lloramos,
sólo sabemos decirte
¡ descansa con Dios,Javier!.
aquí,los que te lloramos,
sólo sabemos decirte
¡ descansa con Dios,Javier!.
En Las Palmas, a 3 de Abril de 1.995
No hay comentarios:
Publicar un comentario